¿Qué es la meditación?

Meditación es un término que incluye una gran variedad de prácticas que a menudo son diferentes tanto en el método formal como en el marco teórico que las sustenta. Pero sin lugar a dudas, todas las ténicas de meditación coinciden con el fin que persiguen: buscan un cambio de estado de conciencia, esto es, alcanzar la "iluminación" o la "liberación".

Todas las religiones tiene una rama generalmente esotérica que desarrolla estudios y prácticas con el objeto de producir en el devoto una experiencia religiosa personal de tipo mística. El modo en que esta práctica se fue manifestando, ha dependido de diversas circunstancias geográficas de históricas, así como también de las características individuales de determinados individuos. Pero desde el yoga y el zen hasta los ejercicios espirituales de San Ignacio de Loyola, pasando por la danza mística de los derviches y las prácticas chamánicas, toda tradición religiosa, desarrollar técnicas con objetivos místicos.

La meditación, entonces, no es un fin en sí misma, pero es algo más que un medio. Podría decirse, en síntesis que es la meta está en el mismo camino.

Dominar la práctica de la meditación no es posible sin una perseverante práctica. En las etapas iniciales, suele ser frecuente hallar serenidad en la concentración. Según la tradición, esto se logra a través de ejercios corporales o respiratorios (Hayha Yoga), la concentración en formas simbólicas (mandalas) o en sonidos (mantras), las prácticas devocionales del cristianismo y el hinduísmo, o las reflexión sobre imagénes verables del zen (koan). Pero una vez que la práctica se hace periódica un nuevo estado de conciencia se hace presente: el prácticante intuye la presencia divina y descubre su profunda unión con el Absoluto.

por Graciela Paula Caldeiro